CÓMO MEJORAR EL RENDIMIENTO DEPORTIVO CON CÁMARA HIPERBÁRICA

¿Sabías que la cámara hiperbárica mejora el rendimiento deportivo y es un método permitido por la AMA, la USADA y el resto de agencias antidopaje?

Clásicamente, en atletas de élite, se ha realizado entrenamiento en altura: la disminución de la presión parcial de O2 en altura estimula la fabricación de glóbulos rojos en la médula ósea y su paso a la sangre. Esto mejorará el posterior rendimiento físico en la competición a nivel del mar, al poderse transportar mayor cantidad de oxígeno (mayor número de glóbulos rojos, mayor cantidad de hemoglobina). No obstante, añadir más glóbulos rojos al sistema cardiovascular puede sobrecargarlo (Costill y Willmore, 1997), haciendo que la sangre se vuelva demasiado viscosa, lo cual puede no ser lo más beneficioso en determinados deportes que requieren esfuerzos muy prolongados.

Por el contrario, al respirar O2 puro en un ambiente de presión elevada, por encima de la atmosférica (como en una cámara hiperbárica) ese O2 se disuelve en el plasma (el líquido de la sangre) y puede impregnar todos los tejidos del cuerpo, incluso difundirse en aquéllas zonas con poca vascularización que sufren isquemia durante el ejercicio prolongado e intenso. Por tanto los tejidos recibirán mayor cantidad de O2, sin aumentar el número de glóbulos rojos en la sangre, mejorando el rendimiento deportivo y acelerando la recuperación.

 

La cámara hiperbárica:

- promueve la neovascularización y microangiogénesis (formación de nuevos vasos circulatorios).

- estimula la proliferación de fibroblastos (células encargadas de fabricar y estructurar el colágeno en los tejidos) y la formación de colágeno por parte de los mismos.

- reduce el edema y la inflamación alrededor del tejido lesionado (la zona afectada por una lesión tiene una disminución del aporte de oxígeno debido a la lesión vascular, al efecto inflamatorio y a la alteración de la permeabilidad vascular).

 

En diferentes estudios con cámara hiperbárica, se ha encontrado un aumento en la tolerancia al ejercicio y un incremento en la energía muscular, a expensas de un aumento de ATP (adenosín trifosfato, principal fuente de energía para la mayoría de las funciones celulares).Con su uso en la preparación del atleta, se encontró un aumento significativo de la potencia anaerobia evidenciada por los Test de Saltabilidad y Ergosalto (Carmelo Bosco), encontrando un aumento en el número de saltos, de la altura media alcanzada y del tiempo total del ciclo, con reducción del tiempo de contacto. La frecuencia cardiaca fue significativamente más baja en la recuperación (estudio realizado en jugadores de voleibol).

En otros estudios, Confalonieri y sus colaboradores, valoraron la eficacia de la cámara hiperbárica en la práctica de la natación, encontrando una reducción en el número de brazadas, debido a que cada brazada es más eficaz en un mismo tiempo. También evidenciaron modificaciones en la fuerza, por medio del Test de Bosco (que mide la capacidad anaeróbica, la potencia anaeróbica del tren inferior así como la fatiga anaeróbica y la fuerza-elástico-refleja) y con el Test de Conconi (que mide la forma física, en especial de los deportes cíclicos tales como el atletismo, la natación o el ciclismo).

Fisher, en condiciones hiperbáricas, mostró reducción de los niveles en sangre de: lactato y piruvato, reducción de la viscosidad sanguínea y aumento de la elasticidad eritrocitaria.

Todo lo anterior nos permite decir que la cámara hiperbárica puede disminuir los niveles séricos de los productos químicos que nos dan la sensación de agotamiento y que bioquímicamente disminuyen la capacidad física. También disminuye la frecuencia cardíaca, lo que se considera como parte del aumento del tono parasimpático. Una disminución de la frecuencia cardíaca, de en torno a un 10%, es un indicador favorable de la influencia de oxígeno hiperbárico. Este criterio lo utilizan los especialistas en Oxigenoterapia Hiperbárica en Rusia para evaluar la coherencia del protocolo de tratamiento empleado en cada paciente individualmente.

Pero casi más importante que los resultados de los estudios, son los testimonios y sensaciones de las personas que han empleado esta terapia. Muchos deportistas profesionales disponen de cámaras hiperbáricas en sus domicilios. Para “una rápida recuperación tras un partido difícil” (Novak Djokovic). “Te ayuda a recuperar más rápido, y yo aprovecho cualquier ventaja que esté a mi alcance” (Tiger Woods). Muchos de ellos la han utilizado para curar lesiones en tiempo récord (Valentino Rossi, Falcao, Crisitiano Ronaldo, Leo Messi…) o para mejorar su resistencia y longevidad deportiva (Raúl González).